Desde hace siglos se viene utilizando el universo gallinaceo para contar chascarrillos, chistes o pequeños cuentos con moralenja. Tambíen han sido frecuentes las palabras gallo, gallina, pollo, huevo etc, para la formulación de dichos, ahora populares y de origen incierto o documentado; incluso habrán formado parte de verdaderas narraciones o cuentos. Tambíen se han utilizado hasta la saciedad con sentidos desviados,
Me he propuesto ir registrando todo lo que recuerde o me encuentre. La diversidad cultural de la península da mucho juego en este aspecto y me gustaría contar con la colaboración de todo aquel que conozca, recuerde o haya leido algo a este respecto. Sería interesante, así mismo intentar ver qué vínculos se han establecido entre esta familia de palabras y las relaciones hombre-mujer. Me encanta que me cuenten historias. Salud.